Transformación de La Mojana: Estrategias contra el cambio climático en uno de los humedales más grandes de Colombia
La Mojana, un complejo entramado de más de 500,000 hectáreas que alberga diversos humedales, ha experimentado un deterioro drástico en las últimas décadas. Miles de campesinos están llevando a cabo diversos esfuerzos para restaurar los ecosistemas de ciénagas, zapales y caños, con el objetivo de mitigar los impactos de las inundaciones y sequías, cada vez más impredecibles y severas debido al cambio climático. Este artículo aborda las estrategias de adaptación y restauración en La Mojana, uno de los humedales más grandes del país.
Antaño, atravesar la Ciénaga de Ayapel, la más importante del departamento de Córdoba en el norte de Colombia, era una travesía que ocupaba varias horas. Sin embargo, en las últimas décadas, el paisaje ha experimentado cambios significativos. Los caños que antes ralentizaban a los lancheros ya no existen, y los extensos parches de plantas flotantes que dificultaban la navegación han desaparecido. Ana María Rivera, residente de la vereda Perú en el extremo sur de la ciénaga, recuerda cómo todo solía estar cubierto de mangle.
La Mojana, que abarca once municipios en varios departamentos, es crucial para la regulación de los caudales de los ríos San Jorge, Cauca y Magdalena, que desembocan en la región. Sin embargo, a pesar de su importancia ecológica y su rica historia arqueológica, la región enfrenta desafíos socioeconómicos significativos, con un alto índice de pobreza multidimensional.
La deforestación, la contaminación por actividades como la minería ilegal y la agricultura intensiva, junto con el cambio climático, han exacerbado la degradación de los ecosistemas en La Mojana. Los fenómenos climáticos extremos, como La Niña y El Niño, han aumentado en intensidad y frecuencia, afectando la capacidad de la región para mitigar inundaciones y mantener recursos hídricos durante las sequías.
En respuesta a estos desafíos, se han implementado diversas iniciativas de restauración y adaptación. El programa ‘Mojana, Clima y Vida’, dirigido por el Fondo de Adaptación, el Ministerio de Ambiente y el PNUD, busca rehabilitar ecosistemas, establecer sistemas de alerta temprana y promover prácticas agrícolas sostenibles. Además, se han establecido Agroecosistemas Biodiversos Familiares (ABIF) para mejorar la seguridad alimentaria y restaurar los modos de vida tradicionales.
Los esfuerzos de restauración incluyen la reforestación con especies nativas, como el mangle, y la promoción de prácticas agrícolas sostenibles. Se han establecido viveros comunitarios para producir plantas y semillas adaptadas a las condiciones locales. Estas iniciativas no solo buscan restaurar los ecosistemas, sino también fortalecer la resiliencia de las comunidades locales frente al cambio climático.
A pesar de los desafíos, los habitantes de La Mojana están comprometidos con la restauración de su territorio. A través de la colaboración con instituciones gubernamentales y organizaciones de la sociedad civil, están trabajando para preservar la rica biodiversidad y los servicios ecosistémicos que La Mojana proporciona. Este artículo es una colaboración entre Mongabay Latam y El Espectador, que destaca las iniciativas de conservación y desarrollo sostenible en La Mojana.