Alto del Sifón: La Nueva Joya del Ciclismo Colombiano y Mundial
Cundinamarca, 17 de junio de 2024. Con el mismo prestigio que Alpe d’Huez y Tourmalet tienen en el Tour de Francia, y el Mortirolo y Stelvio en el Giro de Italia, Colombia ahora introduce un nuevo gigante en su territorio: el Alto del Sifón. Este nuevo puerto se une al ya legendario Alto de Letras, que se ha ganado un lugar en la historia del ciclismo internacional.
El Alto de Letras, conocido por su desafiante ascenso desde Mariquita, es el puerto de montaña más largo del mundo según la UCI, con sus impresionantes 80.7 kilómetros y 3187 metros de desnivel. Durante más de 50 años, ha sido escenario de las más intensas batallas en la Vuelta a Colombia, el Clásico RCN y la Vuelta del Tolima. Ahora, gracias a la construcción de la vía que conecta Manizales con Murillo, este mítico puerto tiene un nuevo compañero: el Alto del Sifón, que se erige como una de las carreteras más altas de Colombia, alcanzando los 4149 metros de altitud en el Parque Nacional de los Nevados, entre Tolima y Caldas.
Este nuevo coloso, el Alto del Sifón, se ha convertido en un desafío tanto para ciclistas profesionales como aficionados. Héctor L. Urrego, Director Comercial y piloto de pruebas, asumió la aventura de escalar los legendarios 89 kilómetros desde Armero Guayabal junto a la Squadra Soferente, brindándonos una crónica detallada de su experiencia.
“Decidimos subir el Alto del Sifón por dos razones: es la etapa reina de la Vuelta a Colombia y queríamos experimentar este reto como equipo. En los casi 50 años de la Revista Mundo Ciclístico, hemos aprendido que en el ciclismo y en la vida es crucial contar con grandes coequiperos, como las grandes marcas que nos apoyan. Gracias a ellas, tuvimos toda la logística necesaria, incluyendo un carro acompañante de Localiza Rent A Car que nos llevó desde Bogotá hasta Mariquita, desde donde iniciamos nuestro ascenso”, explicó Urrego.
La importancia de una buena equipación es innegable en desafíos de esta magnitud. Gracias a Bioracer, el equipo contó con kits de verano e invierno, chaquetas de lluvia y una badana diseñada para soportar más de seis horas de duración, fundamental para enfrentar los casi 90 kilómetros de subida. Además, Enervit proporcionó la guía nutricional necesaria para la subida, con precarga, geles y barras energéticas. Para la protección de la cabeza y los ojos, CyclingPro suministró cascos Met y gafas Scicon, esenciales para enfrentar las variadas condiciones climáticas del ascenso.
“No tuvimos ningún pinchazo gracias a las llantas High Road de Maxxis de 25 y 28 milímetros, que nos permitieron subir más rápido de lo que esperábamos”, agregó Urrego. “La distancia puede variar según Strava, pero el reto de subir 89 kilómetros, alcanzar los 4200 metros de desnivel y escalar más de 4000 metros es una experiencia única y espectacular.”
El recorrido comienza en Líbano, una localidad con gran tradición ciclista, lugar de nacimiento de Freddy González, destacado en el Giro de Italia. La ruta sigue hasta Murillo, donde el cambio de temperatura es abrupto al ascender a más de 3000 metros, y culmina en el Alto del Sifón, un paraíso natural lleno de frailejones que proporciona agua a gran parte de Colombia.
En la cumbre, el equipo experimentó la esencia del ciclismo y extendió una invitación a todos los lectores a unirse en futuras experiencias en los grandes puertos de Colombia y el mundo.