La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) ha decidido archivar el trámite de licenciamiento ambiental para la ampliación de la Autopista Norte en Bogotá, debido a deficiencias técnicas encontradas en el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) presentado.

El proyecto, elaborado por la ANI, que busca expandir la Autopista Norte entre las calles 191 y 245, careció de análisis detallados en el EIA sobre la conectividad hídrica y ecológica de los humedales Torca y Guaymaral, considerados ecosistemas de importancia internacional.

Es relevante destacar que esta decisión no indica la inviabilidad ambiental del proyecto. La concesionaria, “Ruta Bogotá Norte”, tiene la posibilidad de presentar una nueva solicitud de licencia ambiental una vez que se completen los estudios requeridos.

La solicitud de evaluación de licencia ambiental para el Proyecto Accesos Norte Fase II, presentada ante la ANLA para las Unidades Funcionales 1, 2, 3, 4 y 5 en Bogotá, reveló deficiencias técnicas en el EIA. Después de 39 requerimientos emitidos por la ANLA a la concesionaria durante el proceso, esta última presentó una respuesta el 18 de septiembre de 2023.

Sin embargo, la revisión de la información reveló diversas problemáticas, incluyendo la falta de armonización de algunas obras hidráulicas con el Ordenamiento Territorial de Bogotá, omisiones en el reconocimiento de la quebrada Cañiza, y la ausencia de estudios hidráulicos para respaldar la conectividad de los humedales.

El Auto emitido el 4 de enero de 2024 por la ANLA archivó el trámite de licenciamiento ambiental del Proyecto Accesos Norte Fase II debido a las deficiencias identificadas en el EIA. Se destaca que esta decisión no implica la inviabilidad ambiental del proyecto, permitiendo a la concesionaria presentar una nueva solicitud de licencia ambiental cuando se subsanen los vacíos identificados.

Se espera que esta resolución fomente ajustes que aseguren la conectividad de los humedales Torca y Guaymaral, así como la protección de la Estructura Ecológica Principal del Distrito Capital. La nueva administración distrital juega un papel crucial, y se confía en que esta situación sea una oportunidad para fortalecer el Estudio de Impacto Ambiental, garantizando la conservación de los ecosistemas estratégicos y abordando con responsabilidad los desafíos en movilidad.