Innovación Sostenible en la Ganadería: Alimentación de Vacas Angus con Residuos de Frutas y Flores en Sopó
En el municipio de Sopó, en Cundinamarca, una pareja de ganaderos está llevando a cabo un proyecto innovador en la cría de ganado Angus, una de las razas más valoradas en el mundo por la calidad de su carne. En lugar del tradicional pastoreo, que puede tener impactos ambientales significativos, están alimentando a sus animales con residuos de flores y frutas.
Ignacio Villanueva, argentino radicado en Colombia desde 2017, junto con su esposa, María Cristina Vargas, decidió emprender esta iniciativa para producir carne de alta calidad de manera más sostenible. La idea surgió de aprovechar los residuos generados por la industria de las flores y las frutas, que de otro modo terminarían en la basura.
La pareja ha desarrollado una fórmula basada en cáscaras y sobrantes de limón, mandarina, maracuyá, naranja, aguacate, piña y claveles, complementada con residuos de fábricas de galletas para equilibrar la dieta del ganado. Los análisis bromatológicos realizados en laboratorios han confirmado la seguridad de estos alimentos para el consumo animal, sin niveles elevados de agroquímicos.
El resultado es una carne con un marmoleo excepcional, mayor terneza y un engrasamiento más eficiente gracias a la dieta controlada de los animales. Actualmente, Villanueva y Vargas crían más de 100 cabezas de ganado en sus fincas en Sopó y Toca, Boyacá, que comercializan a tres empresas en el país.
Este enfoque sostenible no solo beneficia al medio ambiente al reducir los residuos, sino que también demuestra que es económicamente viable. A pesar de no recibir incentivos adicionales por utilizar residuos, la pareja está comprometida con este modelo que promueve la economía circular y la producción ganadera responsable.
Villanueva y Vargas invitan a cualquier interesado a conocer su proyecto y están abiertos a nuevas colaboraciones para seguir mejorando su práctica. Su iniciativa ejemplifica cómo la innovación puede transformar la ganadería, generando beneficios tanto para el medio ambiente como para la producción alimentaria.