El Parque Tecnológico Nuevo Mondoñedo se ha consolidado como la primera planta de valoración energética con perspectiva regional en Colombia, posicionándose como un modelo de gestión de residuos sólidos y sostenibilidad. En un contexto global de creciente generación de residuos, la economía circular emerge como una solución clave para optimizar el uso de recursos y mitigar la crisis ambiental. Este enfoque, que promueve la reutilización, el reciclaje y la valorización de materiales, cobra especial relevancia en el Relleno Sanitario Nuevo Mondoñedo, que gestiona los desechos de 78 municipios de Cundinamarca.

Desde su inauguración en 2002, como respuesta a la contaminación generada por un botadero a cielo abierto, el relleno ha evolucionado hacia un Parque Tecnológico Ambiental de Recursos Renovables. Su reciente inauguración de la Planta de Valorización Energética, que utiliza tecnología alemana de vanguardia para convertir residuos en energía eléctrica y térmica, marca un hito en la sostenibilidad. La planta cuenta con un motor de cogeneración con una eficiencia energética del 85.3 %, que genera energía suficiente para el autoconsumo de las instalaciones y procesos internos, reduciendo la dependencia de la red eléctrica nacional y disminuyendo la huella de carbono del lugar.

Según Jorge Emilio Rey Ángel, gobernador de Cundinamarca, la planta reducirá la emisión de 25.000 toneladas de CO2 anualmente, transformando el relleno en un modelo de “relleno neutro de materia contaminante de gases de efecto invernadero.” Por su parte, Javier Lacoma, representante legal de Nuevo Mondoñedo, destacó el respaldo de la Gobernación como crucial para la evolución de este proyecto, que busca incorporar los principios de sostenibilidad y descarbonización.

El Parque Ambiental también inaugurará una planta mineral que producirá fertilizantes orgánicos, beneficiando a los cundinamarqueses con aproximadamente 50 toneladas diarias. Además, la Gobernación firmó un acuerdo con Empresas Públicas de Cundinamarca para implementar parques tecnológicos ambientales en otras zonas del departamento, como una planta de compostaje en Soacha que contribuirá a la transformación de residuos orgánicos en fertilizantes.

Este proyecto demuestra cómo la innovación, la colaboración y la tecnología pueden transformar los desafíos ambientales en oportunidades para el desarrollo sostenible. La Planta de Valorización Energética y el futuro parque de compostaje en Soacha son ejemplos claros de cómo avanzar hacia una economía circular que promueva la sostenibilidad y el progreso económico, reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero y mejorando la calidad de vida en la región.