Opinión. Por: Clemencia López, Cruz Antía. Foto: Manifestación de Porristas en Chía.

TODOS SOMOS LUCAS VILLA… los que hacemos equilibrio día a día, no para vivir sino para sobrevivir, pacifistas, manifestándonos con la alegría, la música, el canto, el baile, el deporte, la naturaleza, la justicia, por la implementación y cumplimiento de los acuerdos de paz, el trabajo digno, la salud, el derecho a un techo, con  genuina voz, con dolor de patria, todos somos Lucas Villa y marchamos con la firme convicción de que podemos dar pasos firmes en el cambio de rumbo de Colombia.

Al ver el vil atentado por sectores que se ocultan en la noche, con carros de alta gama, con armas sofisticadas, para dar en el cuerpo desarmado de “Lucas Colombia”, ocho tiros, ocho… que puntería solo de francotirador especializado, cumpliendo órdenes, no puede haber otra razón…

¡Porque hay que acallar la voz ciudadana!

“Lucas Colombia” es de tajo prejuzgado sin derecho a defenderse, solo por su racionamiento,  su andar  y por visibilizar los graves problemas del país, durante décadas… sino siglos.  Un Lucas que es señalado sin asomo de vergüenza como “vándalo”, como violento, a pesar que en cada movilización ciudadana es agredido, detenido a rastras por la institución que la Constitución Política Colombiana  ordena proteger la vida de los ciudadanos, pateado cuando yace en el piso, jóvenes incluso menores de edad, “Lucas” que son subidos por más de cinco policías a un carro, que grita su documento de identidad, su nombre, que pide casi llorando que no se lo lleven, que solo pasaba en el momento equivocado.

Policías,  militares y los tristemente célebres Escuadrones Móviles Antidisturbios de la Policía Nacional – ESMAD que cumplen ordenes, sin procesar siquiera que están dañando al pueblo que juraron defender, un comandante que les grita ‘ajua’… no sabemos si para felicitar o para incitar… AJUA acrónimo que hizo famoso el @GeneralNavas comandante general @FuerzasMilCol Arrojo, Justicia, Unión, Abnegación;  fe en la causa, con todas nuestras fuerzas, ¡actitud positiva para vencer!), pero toca preguntar, para vencer a quién? 

La violencia genera más violencia no importa de donde venga

En todas las marchas ciudadanas he visto niños, adolescentes, que esperan tener un mejor futuro, jóvenes y adultos que con gran dificultad lograron estudiar y terminar una carrera, para luego salir y no encontrar opciones laborales , y si la encuentran,  los empleadores se aprovechan de la necesidad y los sobrecargan de trabajo, y les pagan menos de dos salarios mínimos o peor aún, muchos acaban como conductores de taxis, uber o rapy, o engrosando la estadística de desempleados.  Y qué decir de los que ni siquiera tienen acceso a la educación.

Otros tantos salen del país y no quieren volver, porque no hay oportunidades, “fuga de cerebros” con grandes capacidades que podrían ayudar y contribuir a sacar al país adelante.  Pero prefieren no volver, porque no ven luz al final del túnel.

Valiosas expresiones del “LUCAS COLOMBIA” por qué marcho: no a la reforma tributaria, no al asesinato de líderes sociales, no al mal gobierno y por una vida digna para todos los colombianos.  “…de que nuestro país encamine una buena posición y que todos podamos llegar a un fin de consenso, para que a todos nos beneficie, defender nuestra bandera, que es lo que nos identifica”.

“…ya que nos están matando, pues el paro no para”. “..para defender nuestros derechos y el de todos los colombianos” “…Porque se roban la plata y no apoyan el deporte”, “.. Porque no somos vándalos y estamos luchando por los derechos de toda Colombia”.

Hace muchos gobiernos, la ciudadanía se ha manifestado en grupos de diversos intereses individuales y siempre ha ocurrido que estos movimientos han sido fracturados y de alguna manera infiltrados para romper su cohesión, han terminado en “mesas de dialogo, de trabajo” y aun así hoy persisten las mismas demandas ciudadanas.  Paro campesino, estudiantil, indígena, transportador, por la vida, por la paz…

Traigo a mi memoria las palabras de un ciudadano de apellido Giraldo “ningún presidente ni alcalde ‘hereda problemas’. Se supone que los conoce de antemano y por eso se hace elegir, para gobernar con el propósito de corregir esos problemas. Culpar a los predecesores es la salida fácil y mediocre de los malos gobiernos. Si no pueden, no se postulen”.

Hoy “Lucas Colombia” surge y converge en una sola voz.  Porque nos cansamos de gobiernos manipuladores en su lenguaje, que no cumplen ni la palabra y menos los compromisos, que legislan para intereses particulares a costa de los derechos civiles y humanos de sus conciudadanos.

Con la esperanza que se respete la VIDA de todos, se tomen decisiones y se implementen acciones inmediatas para encausar a los que habitamos el territorio de “Lucas Colombia”, continuaremos en el andar de esta ciudadanía que despertó de su letargo y como escribió un chico en las marchas “MAMI, TE VOY A REGALAR UN NUEVO PAIS ¡FELIZ DIA MAMA ¡

….Homenaje a cada colombiano que le han arrebatado la vida…