Opinión: Por: Alfonso Morillo Ricaurte.

DIAS AUN MÁS DIFICILES. El mundo entero afronta la pandemia, Colombia además de la voracidad del virus, con su elevado pico, afronta otra difícil situación, la Reforma Tributaria. Con el solo conocimiento, una vez presentado al Congreso, el temor se apoderó de diferentes estamentos, desde los pequeños empresarios, agricultores, hasta la clase popular, y la clase media, la más afectada, con IVA a los servicios públicos y la gasolina, entre muchos otros impuestos, sin espacio para enumerar.

OPORTUNISMO. La clase política, concretamente los congresistas, saben aprovechar toda oportunidad, y esta es una de ellas, con Reforma Tributaria a bordo, que no puede pasar por alto. Como popularmente se dice, se dan “vitrina” en los medios de comunicación, oponiéndose al proyecto tributario y compartiendo así el rechazo general. Rechazo que se pierde, por encanto, en el momento de la votación cuando se sabe que cumple el cometido, acordado por debajo de la mesa. Y así saldrá triunfante la REFORMA TRIBUTARIA, con la frente en alto, bajo el orgullo de ser la única en el mundo en medio de la pandemia.

PARECE MENTIRA. Fue la expresión, de júbilo más escuchada por los habitantes de Gibraltar, zona fronteriza entre Inglaterra y España, donde, tras estrictas medidas de confinamiento, logró que el 92 por ciento de su población, luego de una eficaz campaña, quedara vacunada. El alborozo en calles, tiendas y restaurantes, era la nota predominante, muchas personas, que sobresalieron por su disciplina de bioseguridad, ya sin tapabocas, expresaban emocionadas, “parece mentira”.

VISTAZO REGIONAL. Las medidas adoptadas por la gobernación de Cundinamarca, encaminadas a detener en mínima parte la ola de contaminación del Covid 19, cuando se confirma la existencia de la cepa británica, son consideradas como poco o casi nada eficaces.  El toque de queda, a las 12 de la noche, de pronto, tendría alguna efectividad, en poblaciones veraniegas, con incidencia en la delincuencia, pero en municipios de clima frio, no se espera que sirva de algo. Ante la realidad actual, en ciudades con hospitales colapsados, las medidas necesariamente deben ser tomadas con decisión y firmeza. Para combatir la indisciplina popular, aguas tibias, no aguanta.

¿LA IMAGEN DE CAJICA, AFECTADA? Cajicá, tradicionalmente ha gozado del aprecio de visitantes, ya sea por la cercanía a la capital del país, por sus restaurantes o  su industria telar y muchas cosas más, como la amabilidad y sencillez de sus gentes. En los últimos días, la población fue epicentro de un condenable acontecimiento, motivo de información para muchos medios a nivel nacional. Entrar en detalles del acontecimiento no vale la pena, ya fue suficientemente conocido.

QUE DEBEMOS HACER. Rescatar la imagen de Cajicá, será el proyecto a seguir, mediante la organización de diferentes eventos artísticos, culturales, recreativos, por ahora virtuales, en los cuales, la apacibilidad de los habitantes sea el papel preponderante.  Y para abolir la intranquilidad de quienes nos visiten, cambiar el nombre del restaurante motivo del escándalo

El meme de la semana.